ESTILO DE VIDA SEDENTARIO

Todos sabemos que es bueno hacer ejercicio y llevar una dieta adecuada para mantenernos sanos. No obstante, para muchos de nosotros es como un consejo de abuela, que escuchamos y luego olvidamos para volver a nuestras viejas costumbres. Pasamos demasiado tiempo delante de la televisión y por si fuera poco, la acompañamos con un montón de comida basura.
 

¿Qué es el estilo de vida sedentario?
El sedentarismo es una forma de vida en la que a lo largo del día una persona no realiza la actividad física necesaria para lo que se considera generalmente saludable. Se caracteriza por periodos prolongado de estar sentado, ya sea frente al televisor o la pantalla del ordenador o cualquier otra cosa. Las personas que viven una vida sedentaria pasan por alto la actividad física y participan en actividades en las que rara vez se requiere ninguna cantidad esfuerzo físico. Según recientes estudios, un estilo de vida sedentario puede ser incluso más peligroso para la salud que fumar. 

 ¿Cómo te afecta llevar un estilo de vida sedentario?

Los abundantes estudios al respecto indican que el sedentarismo contribuye a:

1. Obesidad: El principal efecto de un estilo de vida sedentario es fácilmente visible en el tamaño de tus propios pantalones. Al estar ingiriendo una gran cantidad de calorías y quemando una proporción relativamente pequeña, estas calorías sobrantes se depositan en tu cuerpo en forma de un exceso de grasa corporal. ¡Y esto es solo el principio¡

2. Aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares: Tu corazon debe tener un suministro adecuado de sangre desde los vasos sanguíneos (arterías coronales) para poder seguir funcionando con eficiencia. El sedentarismo ralentiza la circulación y los vasos sanguíneos pueden perder elásticidad o incluso bloquearse. Especialmente en personas de mediana edad, la falta de ejercicio puede incrementar la tasa de mortandad por problemas cardiovasculares en un 52% para hombres y 28% para mujeres.

3. Aumento de riesgo de diabetes: El ejercicio regular ayuda a regular los niveles de glucosa en sangre, y la falta del mismo conlleva un aumento del azucar en sangre que produce un estrés en el páncreas que aumenta las posibilidades de desarrollar diabetes tipo II.

4. Aumento de riesgo de cancer: Al disminuir la actividad aumentamos el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cancer, como el cancer de mama, de colon y otros tipos de tumores malignos. De acuerdo a un estudio realizado en la universidad de Hong Kong, la inactividad física puede incrementar el riesgo de morir de cancer en un 45% en hombres y un 27% en mujeres.

5. Aumento del riesgo de osteoporosis: La inactividad prolongada provoca que tus huesos se debiliten al no estar tan estimulados para soportar tu estructura corporal. El sedentarismo es una de las causas del desarrollo de la artritis y la osteoporosis, las cuales debilitan y vuelven frágiles a los huesos.

6. Pérdida de tono muscular: Los músculos necesitan una actividad regular para funcionar correctamente y mantener un volumen adecuado. Mientras menos los uses, menos tendrás, y mientras menos tengas, más difícil te será realizar tus actividades diarias y mayor será tu riesgo de sufrir lesiones. Además, pasar el dia sentado o tumbado tiene unos graves efectos sobre tu postura y la salud de tu columna, que aumentarán la probabilidad de sufrir dolores de cuello y espalda crónicos.

7. Dificultades para conciliar el sueño: Un estilo de vida sedentario no somete al cuerpo a un esfuerzo significativo, con lo que éste no se siente con la necesidad de descansar en el momento adecuado, lo que puede llevar a problemas de sueño y frecuentemente a insomnio.

8. Dolores de cabeza: Las personas que no hacen ejercicio regularme tienen mayor predisposición a sufrir dolores de cabeza (no relacionados con las migrañas) que los que si que lo hacen.

Esta claro que si has mantenido un estilo de vida sedentario durante mucho tiempo, volver a llevar una vida activa puede parecer muy complicado. No obstante, si empezamos añadiendo gradualmente actividades de baja intensidad como dar paseos, subir escaleras, etc, y después añadimos actividades de mayor intensidad como ir en bicicleta y correr, levantándonos una hora antes todos los días para hacer ejercicio estaremos en camino para alcanzar un estilo de vida activo y sano.