El cáncer es una de las principales causas de mortalidad en el mundo.
Se observan diferencias entre los países, encontrando más incidencia en los países del tercer mundo pero hay ciertos tipos de cáncer que son más abundantes en los países desarrollados, como por ejemplo, cáncer de pulmón, de colon, de mama y de la próstata.
Estas diferencias entres países desarrollados y países pobres pueden ser explicadas por distinta exposición a agentes carcinógenos (países desarrollados con mayor industrialización, países pobres con mayor incidencia de cáncer secundario a enfermedades infecciosas), así como también las diferencia en el acceso a la salud y la menor esperanza de vida en países pobres.
Siguiendo la línea de este blog, me voy a centrar en las posibles relaciones entre la alimentación y el cáncer.
Se ha comprobado que el trébol rojo contiene estrógenos vegetales, llamados fitoestrógenos, al igual que la soja.
La asociación de varios tumores con la obesidad da credibilidad a la posibilidad de que los efectos de la alimentación de elevado contenido de grasas sobre el cáncer pueda explicarse parcialmente por cambios en el balance energético.
Se ha observado que un elevado consumo de soja es el motivo que las japonesas apenas padecen cáncer de mama y sufren menos molestias en la menopausia.
Además, las dietas con un bajo contenido de grasas tienen de por sí una mayor variedad de fuentes de hidratos de carbono, fibra y frutas y hortalizas, lo que parece aportar una protección adicional frente al cáncer. También es importante mantener un ejercicio físico adecuado para prevenir el cáncer, ya que forma parte de un estilo de vida generalmente sano.
Se ha observado que un elevado consumo de soja es el motivo que las japonesas apenas padecen cáncer de mama y sufren menos molestias en la menopausia.
Hay que destacar que la soja tiene un efecto positivo sobre las glándulas mamarias en la pubertad, ya que refuerza las células, disminuyendo así su degeneración y la aparición del cáncer.
Muchos datos experimentales han mostrado que alimentando a las ratas o ratones con alimentos ricos en grasas aumenta la propensión al cáncer de mama, piel, colon, páncreas y próstata.
siempre ha sido sabido que una buena alimentacion y deporte ayuda en la prevencion de esta dura enenfermedad,dedicandome al deporte siento mas afan por luchar contra ella.gracias
ResponderEliminarEs muy importante ser consciente de la capacidad que tenemos de poder evitar, en cierto grado, la aparición del cáncer a través de llevar una vida saludable. El próximo paso es llevarlo a cabo. Gracias por poner esta información al alcance de todos ^^.
ResponderEliminarDebemos ser conscientes de la importancia de llevar una alimentación sana,ya que como bien explica en otras sociedades evitan muchas enfermedades por su alimentación
ResponderEliminarPara complementar un poco lo que ha dicho David, una persona que está acostumbrada a hacer deporte "y si es a nivel competicion más aun" está acostumbrada a los desafios y a la autosuperación por lo que afrontará la enfermedad de una manera más positiva.
ResponderEliminarGracias por los consejos ^
Y en las mujeres de la zona mediterránea la prevalencia también es menor por la dieta rica en polifenoles del aceite de oliva y el vino!
ResponderEliminar¡¡Gracias por aportar datos tan interesantes!!
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