Hace unos días Alba nos hablaba sobre los peligros de automedicarse ; en esta ocasión querría hacerlo sobre las campañas impulsadas desde el Gobierno para frenar el problema en España, conducta desgraciadamente extendida por todo el país. De esto no se escapa la Comunidad Valenciana, situación a la que me referiré más tarde.
La prevención de la automedicación ha formado parte,con bastante frecuencia, de las campañas organizadas por parte del Ministerio de Sanidad durante los últimos 6 años apareciendo en las campañas de 2005-2007 y durante el presente 2011.
El mensaje, se ha visto modificado de campaña en en campaña, desde el fomento de un uso racional del medicamento en 2005 y 2006, pasando por el intento por frenar el uso indiscriminado de los antibióticos en 2007. Así llegamos hasta la más reciente: los medicamentos no son un juego, nos los tomes a la ligera; cuyo spot os enlazo: http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=sbNQGstymCY
Añado además el link con la imformación relativa las campañas del ministerio http://www.msps.es/campannas/campanas11/home.htm
No obstante, podemos entrever ciertos contenidos comunes en cada campaña; el medicamento es un medio para curar o aliviar los síntomas de las enfermedades, que debe ser prescrito por un médico. La automedicación es perjudicial para la salud si se refiere a medicamentos que deban adquirirse con receta médica. Por otro lado, los medicamentos se han de tomar según prescripción facultativa, adecuada a las necesidades clínicas de cada paciente, en las dosis precisas, según sus requerimientos individuales, con la información para su correcto uso y durante el período de tiempo adecuado. No debe abandonarse un tratamiento sin previa consulta con el médico.
En relación a la Comunidad Valencia, me gustaría enlazar un interesante estudio llevado a cabo en 2009 por Sandra Paris Angulo, Estudio sobre la Automedicación en la Comunidad Valenciana. Se trata de un estudio descriptivo, transversal y retrospectivo de la manera en que una muestra de población adulta de hombres y mujeres valencianos consumen medicamentos por voluntad propia, atendiendo a Se obtuvieron resultados llamativos, un 80% de los sujetos seleccionados, que provenían de sectores socioeconómicos diversos, se automedicaban; preferentemente para remediar el dolor de cabeza y síntomas del resfriado y la gripe.Por tanto, los medicamentos más empleados fueron los analgésicos y antibióticos. Hubo mayor nivel de consumo en jóvenes, y no se encontraron diferencias de sexo, contradicen dos de las hipótesis que se formulan cuando hablamos de automedicación: se automedican más las mujeres, y los adultos lo hacen más que los jóvenes porque sufren más enfermedades.
Dejo aquí el link de la investigación para que los que quieran abundar en el tema: http://mural.uv.es/sanpan/mi%20trabajo.html
La automedicación de una forma moderada y para dolencias leves, que se pueden paliar con medicamentos sin receta, en mi opinión no entraña ningún problema... ( todos nos tomamos un ibuprofeno si nos duele la cabeza o un frenador si tenemos un resfriado y nadie pide prescripción médica ) Para mi el problema viene sobretodo en la parte de los medicamentos con receta y en especial, bajo mi punto de vista, con el consumo de los ansiolíticos tipo diazepan etc.
ResponderEliminarEsos medicamentos son más adictivos que algunas drogas porque influyen sobre la conducta y tienen efectos potentes y hay todo un mercado negro al rededor de los mismos y gente que los compra y consume clandestinamente o que pasan por encima del médico y medican a su hijo creyendo que tiene TDA-H cuando puede tener otro trastorno por poner un ejemplo.. Eso sí que es preocupante porque dejar luego de tomar esos fármacos puede ser un auténtico infierno generando síndromes de abstinencia similares a drogas muy potentes.
Otra cosa que debería de plantearse como preocupante es la cultura que se está extendiendo del uso indiscriminado de fármacos, si a uno le duele algo toma el medicamento para eso y la dolencia desaparece, todo con gran inmediatez. Desde el punto de vista psicológico a mi me preocupa que la gente se tome un trankimazin si se siente alterado con la misma facilidad que se toma un paracetamol si le duele la cabezsa. En ese sentido y aunque sea un caso muy extremo puede que la secta de la Cienciología acierte al pasar al extremo contrario y prescindir del uso de los medicamentos.
Es una solución muy extrema pero entre el no uso y el abuso, que es el punto en el que estamos, uno no sabe qué pensar...